Investigadores del grupo Minerva de la US y cirujanos del Virgen del Rocío trabajan en el desarrollo de una herramienta de apoyo en la toma de decisiones y evitar la pérdida de injertos
La inteligencia artificial (IA) está demostrando ser una herramienta prometedora para optimizar y mejorar los resultados en los trasplantes hepáticos. Utilizar un sistema informático para evaluar los parámetros de un órgano donado y obtener una predicción sobre su adecuación y la probabilidad de aceptación por parte del receptor representa un objetivo innovador en el campo de los trasplantes, y ya se están haciendo progresos en esta dirección.
El grupo de investigación Minerva de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Informática de la Universidad de Sevilla, en colaboración con la Unidad de Cirugía del Hospital Virgen del Rocío, ha publicado un estudio que propone una metodología basada en esta tecnología para mejorar los trasplantes hepáticos, ofreciendo resultados prometedores para la toma de decisiones.
El doctor Javier Padillo, coautor del estudio y catedrático de Cirugía en el Virgen del Rocío, destaca la importancia de este primer paso para comprender mejor la compatibilidad entre donantes y receptores y cómo la IA podría ayudar a los cirujanos a aprovechar órganos que anteriormente podrían no haber sido considerados, aumentando así las posibilidades de trasplante para pacientes en situación crítica.
El estudio, todavía en sus etapas iniciales, sugiere un modelo que, aunque no se ha implementado clínicamente, muestra gran potencial para identificar los parámetros óptimos para seleccionar órganos para los receptores más adecuados, asegurando mejores resultados. Este modelo ha sido desarrollado a partir de datos de 350 trasplantes hepáticos, aplicando técnicas de aprendizaje automático y ha logrado predecir la adecuación de los órganos con una precisión del 85%.
Por otro lado, el cirujano Luis Miguel Marín, también autor del estudio, señala que estos avances podrían ser clave para optimizar el uso de órganos disponibles y reducir las pérdidas. El estudio inició a raíz de una situación en la que un órgano ideal fue rechazado por no ser considerado óptimo, lo que resalta la necesidad de herramientas que apoyen la decisión del cirujano en base a un análisis más profundo y objetivo proporcionado por la IA.
Finalmente, el equipo, incluido el doctor Juan Manuel Castillo y el catedrático José Cristóbal Riquelme, continúa trabajando en perfeccionar estos modelos, con la esperanza de que la IA no solo mecanice decisiones críticas en la cirugía de trasplante sino que también ofrezca explicaciones claras y comprensibles para sus recomendaciones, cumpliendo con los criterios de «explicabilidad» requeridos en aplicaciones médicas. Los resultados del estudio han sido divulgados en una revista científica y presentados en el último Congreso Nacional de Trasplante Hepático.